lunes, 12 de julio de 2021

Análisis de la película "Todo sobre mi madre"

                            Todo  sobre mi Madre. Almodovar 

   Los sujetos nos vamos constituyendo a partir de las prácticas sociales de nuestro tiempo y de los discursos que circulan dando cuenta de esas prácticas y coadyuvando a constituirlas.

  Somos sujetos fragmentados o multifrenéticos, lo cual no necesariamente provoca una situación alarmante, ya que del caos- sabido es- puede surgir el orden o, mejor dicho, un nuevo orden. Pretendo señalar  algunas perspectivas de nuestra actual conformación como sujetos, es decir, señalar como nos auto identificamos como personas a partir de nuestra vida cotidiana actual.

   Si desde la posmodernidad queremos pensar esa experiencia de lo cotidiano, cabe remitirnos a los acontecimientos surgidos a partir de la Segunda Guerra Mundial. Momentos históricos en que los cambios avasallantes en las prácticas sociales han alterado casi todas las maneras cotidianas de relacionarnos con los demás y con el mundo. Por lo tanto, se ha alterado la manera de construir nuestra identidad  como personas. La identidad personal se conforma a partir de la “confrontación” de los modelos que provee la realidad y nuestras propias valoraciones y conductas.

  En España, con la caída del franquismo, desaparecen los modelos estables,  donde  era impensable la movilidad social, todo era más previsible y “ordenado”. Las identificaciones son unívocas y hegemónicas, se evitan las indefiniciones, tan temidas por quienes detentaban el poder en forma cruenta y dictatorial. Cada uno se tenía que atener a modelos estables, preestablecidos rígidos, de crueldad, de inclemencia y de violencia de todo tipo.

  El mundo, desde ese entonces, y la relación entre los sujetos han sufridos cambios profundos en lapsos cada vez más cortos. Esto puede verse en todo tipo de relaciones, tales como las familiares, laborales, educativas o sociales en general. Muchos son los motivos, pero se ha generado un cimbronazo social producido entre otras cosas, por las nuevas tecnologías que han fragmentado o pulverizado los núcleos duros e ideas regulativas y rectoras de nuestros valores y ha generado el fin de las ideologías.

   Asistimos a una suerte de destiempo o desencuentro entre nuevas formas de cotidianidad surgidas de la eclosión de las tecnologías y el lenguaje en nuestras relaciones humanas.

   Ahora vayamos al cineasta que nos ocupa. Analizando el hilo fino que une las películas el director español más universal, ha hilvanado un cosmos cinematográfico especial.

   Es un cineasta posmoderno que aborda las claves formales y temáticas que definen una filmografía, donde el melodrama y la mirada irónica se dan cita con la homosexualidad, la religión, las máscaras y los símbolos tal como lo evidencia la película “Todo sobre mi madre”

   Un particular mundo que habla de lo universal en lo local: mujeres que luchan, sufren y no dependen de nadie.

Sus películas muestran una paleta de colores fríos, como el verde, el azul y el violeta, pero por sobre todo son recurrentes colores cálidos como el amarillo, el rojo el naranja. Tienen sus películas una estética barroca, que es él mismo y se hace una lectura inmediata desde lo visual.

 Lo local, en este caso Madrid y en la ciudad de Barcelona, conviven diferentes sub-mundos, de clase superior conjuntamente con la existencia de un mundo “under”  que le permite transmitir el mundo de afectos y de sentimientos, particulares y universalizarlos.

   Almodovar trata los afectos, con radicalidad, como asuntos de vida o muerte. Por otro lado, su cine tiene un tratamiento posmoderno, es un cinematografía marcada por la cita- los libros, las pinturas y las canciones,  tal como lo hemos visto es varias imágenes de la película. El relato, en ella, es fragmentario, los personajes un tanto exóticos, sombríos, desquiciados y el humor desde la distancia irónica. Hace el cine que quiere, sin estar supeditado a las modas. Sus películas trascienden el espacio y el tiempo concreto de la sociedad española hasta adquirir un valor universal. Ha sido más valorado fuera de España, que en su propio país.

   A los largo de sus 30 años  de trayectoria, ha habido un cambio. Su cine es mucho menos provocador, tiene una estética menos barroca, sus personajes no son tan border y son menos conflictivos con la cultura de la época.

Es un cine más desnudo de efectivismos y busca una mayor profundidad en las escenas que presenta en sus films. Sus películas tienen menos disgresiones, menos humor, menos descansos para intercalar sub tramas y están más concentrados.

  En sus melodramas las canciones tienen mucha importancia y utiliza un lenguaje no realista, donde todo es representación.

   Detrás del lenguaje hay unos temas y valores que permanecen siempre.

¿Qué temas son?

1.- La identidad sexual, reformulación de la familia.- lo vimos en la película en varias escenas- , el des amor en las mujeres o el dolor de la pérdida- la muerte de Esteban, atropellado por un automovilista, el hijo de Cecilia Roth, la muerte de la mujer en el momento de dar a luz su bebé… y ella se hace cargo…

2.- La fuerza que tienen los personajes de las mujeres, que son siempre más potentes que de los hombres. Las mujeres desarrollan una amistad cómplice y solidaria fuerte entre ellas. El sexo es libre, variado, lúdico y en el fondo está el amor.

Su cine es atractivo por los encuadres visuales y el color. Las canciones no son un relleno, sino tienen un valor narrativo, temático o de caracterización de sentimientos de un personaje.

Sus películas siempre están abiertas al debate, abunda el cine dentro del cine.

     

Análisis de la película "Pieza inconclusa para piano mecánico"

 Película Pieza Inconclusa para piano mecánico

 

Vemos, en esta película, De finales del Siglo XIX, donde ya se muestra la decadencia de la aristocracia rusa. Un mundo rendido a los pies de los placeres del cuerpo y su belleza, donde el bienestar físico es sinónimo de éxito y plenitud personal, como lo vemos en la escena campestre y en los bailes de los palacios de la época zarista. Ya están avizorando su propia decadencia, pero todavía lejos de comprender que se avecinan los tiempos del advenimiento del comunismo, generado por sus injusticias y explotación de los campesinos, que van comenzando a rebelarse , y también muestra, por parte de los aristócratas la desvalorización de la clase social de los “mercaderes” que iban ganando el “poder” que ellos iban perdiéndolo!

Su decadencia es desde la moralidad, social, política y económica una actitud nihilista, Anna, la anfitriona expresa varias veces “estoy harta”, se evidencia un estado anímico de aburrimiento a lo largo de la reunión. Y una actitud despectiva y de desvalorización permanente, tanto al médico como al maestro frustrado. Los participantes de la reunión, todos personajes, se escondían detrás de diferentes máscaras, su vacío emocional, una vida sin proyectos basada en lo efímero y pasajero. Vacuidad existencial total y que generaba resquebrajamiento en los vínculos entre ellos. Lo expresa muy bien la música de fondo, a lo largo de todo el film : “Una lágrima furtiva” que patentiza crudamente y descarnadamente el sin sentido de sus vidas y el grito y clamor ante las injusticias.

Las grietas entre los vínculos fueron surgiendo, y evidenciado las dudas y desconciertos de estas existencias sin fe, que escondían su dolor y desasosiego, atravesado por una falta de espera y de esperanza en el qué y quién del “otro” humano. Para mí, la escena más fuerte y que más lo refleja es el momento en que Mijail sale corriendo y se tira al río y su esposa , Alejandra, lo busca con desesperación, le abre su ser y su corazón con autenticidad, dolor y pidiendo perdón por su hipocresía y tibieza y aparece en ella ese rostro bifronte, que le promete amor, fidelidad; pidiéndole que ese vacío no se instale más en sus vidas. Alejarse de ese mundo de orfandad y construir un nuevo mundo basado en el amor y en lo trascendente.

Nos está diciendo que el gran reto de la persona, no es el “atrévete a saber” , ni el hedonista “atrévete a disfrutar”, sino que es “atrévete a construir” tu ser personal desde la autenticidad axilógica y sintiente.

Es a través de la palabra, del amor, que el hombre toma conciencia de sí y de su propia dignidad humana. Escuchando y acogiendo la llamada del otro –del pobre, del necesitado- , el hombre se libera de su egocentrismo y vacío interior, que lleva dentro de y lo pone al servicio y reconocimiento de los demás.

Análisis de la película "Momentos que duran para siempre"

                 Momentos que duran para siempre

                                                                 Maria Cristina Roth

  El género de la película: drama, su origen es una co-producción entre Suecia, Finlandia, Noruega Alemania y Dinamarca.

  Ambientada en los albores del siglo pasado, está inspirada en la biografía de la abuela del director Jan Troell, en una época de cambios sociales y descontento, de guerra y pobreza y una clase obrera joven y trabajadora. Ya al comienzo del largometraje hay una voz en off que describe la mirada atenta y original de María Larssons, la gran protagonista de la película. Troell recrea con gran estética y delicadeza, las anécdotas y vivencias  existenciales de una progenitora llena de sensibilidad, coraje, fortaleza, resiliencia y firmeza.

   Se desarrolla la historia en 1907 cuando María conoce a Sigfrid un hombre libertino, con el que se casa siendo ella aún muy joven, y, prontamente ella evidencia su falta de responsabilidad, constancia y de perseverancia para conservar ningún empleo. Esa actitud de ineptitud, ligereza y liviandad, en la personalidad de su marido, generan ira, frustración, violencia interna y externa que terminan manifestándose, tanto en el ámbito doméstico, familiar y de la vecindad.

   Ella siente un gran desengaño amoroso, decepción, y pesadumbre y busca protección en la casa de sus padres, pero allí no encuentra el apoyo esperado; tal vez, por la rigidez moral y religiosa de la época y su familia sumado a la organización social y cultural de un fuerte patriarcado y verticalidad imperante en la época.

   Debe regresar a su hogar siguiendo el mandato de su padre que “la unión matrimonial es hasta que la muerte los separe”, aunque su rostro lastimado evidenciaba que había sido golpeada por la violencia de su marido. El camino de  retorno lo emprende, con un gran dolor de no haber sido comprendida y con una gran frustración.

  En las diferentes escenas, a lo largo de la película, ante los actos hostiles y de agresividad descontrolada de su marido ella manifiesta una gran resiliencia y lucha por conservar la familia, preservar a sus hijos que observan y padecen esa violencia intrafamiliar con el agregado que , a medida que iban creciendo, se presentaba en algunos de ellos, un sentimiento de ambivalencia ante el trato y agresión de sus amigos diciéndoles , por ejemplo, que su padre era alcohólico, generando una gresca callejera entre ellos, y al llegar al hogar el padre, sin piedad ni racionalidad alguna los castigaba a ellos cruelmente. También  ven con qué descaro, desparpajo  y hasta con osadía, se pasea por el pueblo con otras mujeres  abiertamente engañando y ultrajando en su reputación  y humillando a su madre ante la gente del pueblo.

  Ellos dolidos, observan la lucha cotidiana de María, de ser una buena madre, una buena ama de casa, luchadora y muchas veces tiene que salir a buscar a proveer el alimento para la familia, tiene 7 hijos, siete bocas para alimentar, con ese desaforado, que en la desazón y ansiedad han sido engendrados.

  Pero el destino quiere que ella, en una rifa,  se gane una máquina de fotos, ella no sabe qué destino darle y como necesita dinero  decide venderla… Esta decisión genera un cambio significativo en su vida, y es así cuando comienza a disfrutar de la amistad, y el afecto con el señor Pettersen, dueño de una tienda de fotografías en el barrio.

  Quien le muestra que a través de esa lente ella accede a ver otras cosas de la vida, que no imaginaba ni conocía, provocando todo un giro copernicano en su mundo interior que se abre a un universo desconocido, inédito e ignorado, pero que se torna atrapante, lleno de sorpresas y posibilidades.

   Ante este incentivo es cuando se anima hacer sus propias fotos, y de esa manera la cámara se convierte, para ella en un ventanal al cosmos con un sentido mágico también para captar, las escenas de la vida cotidiana en forma prodigiosa y admirable  que le suministran un respiro a su tumultuosa y difícil existencia cotidiana.

  La película tiene una buena narración escénica, visualmente me resultó bellísima, muy emotiva, con emociones muy fuertes y duras, pero los personajes bien protegidos y logrados y una gran ternura en los rostros de esos bellos, asustados y sufrientes siete hijos!!!

   Hay algunas referencias históricas, como la presencia de la Primera Guerra Mundial y las consecuencias que trajo en la vida de ellos, hambruna, escasez, pobreza, pero enfocada en un segundo plano. La luz y la música patentizan en forma estética exquisita, las diferentes pasiones, el sacrificio, el dolor, los momentos de algarabía y alegría familiar y del pueblo.

  Siempre se puede encontrar una salida, o huida a ese mundo desesperanzado, hostil que no los albergaba, sino que los hacía sentir como extranjeros, aún en su propia tierra.

  ¿Qué mensaje me deja esta película? Que no es sólo una pintura estética e históricamente impecable de la vida en los comienzos el siglo XX, sino internalizar en lo más profundo de mí   y reflexionar sobre los modos, en que hoy, concebimos y experimentamos el amor, a la vez que apunta a encontrar formas más plenas de vivirlo individualmente y comunitariamente.        

Análisis de la película "Mi dulce pueblito"

 MI DULCE PUEBLITO

Elogio de la vida sencilla

Los habitantes de Krekovice, en un pueblo cercano a Praga, viven en un régimen de cooperativa, siguiendo el modelo soviético impuesto desde Checoslovaquia después de la Segunda Guerra Mundial. Por lo tanto, todos son responsables de Otik joven retrasado que vive solo.

   Es una comedia costumbrista de una dulzura extraordinaria, fruto de un cine con mayúsculas, sin desvaríos técnicos.

   Inspirada película coral de Jury Menzel, que pese a desarrollarse en plena época comunista lo hace con una libertad de espíritu que no teme la censura, pinta la realidad cotidiana de la gente que vive allí, con su habitual lirismo, no exento de un tono agridulce.

   Allí está el camionero Pávek, gordito padre de familia, que forma una peculiar relación con Otik, una suerte de Hardy y Laurel a la checa. Pável ha admitido a Otik en su compañía por lástima, pero por momentos se harta de las rarezas.

   Otros personajes que transitan por el pueblecito son el distraído médico, el adolescente enamorado de la profesora, el nuevo artista que acaba de llegar al pueblo, el marido engañado con el veterinario recién arribado al pueblo y el jefe del pueblo…

   Todos están bien perfilados, y van sucediéndose viñetas costumbristas donde conviven lo trágico y lo cómico; y se contrapone la amistad a la camaradería con las prebendas y la burocracia del partido, la vida y la moralidad de los habitantes del pueblo con la hipocresía de otros…

 El mensaje central es reivindicar con sentido del humor tragicómico la vida sencilla, con cierta bondad y solidaridad que debe ser respetada a toda costa….

  En muchas secuencias son parcas en palabras, pura imagen casi sin “slapstick”, bien apoyadas en la música de Jury Sust.

   Y está felizmente resuelto el desenlace, los dos amigos de espalda, en un gran plano secuencia, alejándose rítmicamente a comenzar su jornada diaria.

   La dirección es magistral y por momentos experimenté y sentí una creciente tristeza en el alma.

   Está a un paso de la genialidad y lo sobresaliente es que recorre el camino con una simpleza de seductora naturalidad, rebosante de humanidad, que es el atractivo perfecto para que aflore, desde nuestra interioridad, lo mejor de nosotros.

   Este el concepto de cine, en el que más creo, igual podría decir de la música y de la literatura, alejado del artificio gratuito, y de la enorme capacidad alienante que a veces nos vemos bombardeados….

  Por ello, concluyo sintiendo y pensando: no brilla el oro, brilla el alma.

        

María Cristina Roth

 

 

Análisis de la película "La guerra de los botones"

                   LA GUERRA DE LOS BOTONES

 

                                                             Versión 2011

   Miré las dos versiones, esta vez, me gustó más esta versión y haré cierta comparación con la versión del 1962.

   Se remiten, estas películas, a un delicioso y atrapante relato de aventuras infantiles y juveniles, en el cuál dos grupos de amigos de poblaciones vecinas, se enfrentan en batallas campales y juegan con todo tipo de estrategias para derrotar a sus enemigos.  No se trata de una guerra encarnizada, cruel o violenta; sino más bien de enfrentamiento entre personalidades líderes, de dos grupos,  que con símbolos y alegóricamente llegan a altos parámetros y niveles de antipatía y enemistad.

   Es la guerra de los botones, una de las tácticas distintivas es sacar los botones de los vestidos a cualquiera que sea atrapado, capturado por el otro bando, es un símbolo de poderío  y humillación mandarlo a su casa o a su barrio de regreso con”esa mutilación” que genera retos y burlas, en sus casa, por sus padres, en el barrio vergüenza.

   Barrratier ha narrado una historia entretenida del principio al fin.  Y ha logrado, a mi parecer, desde esos dos puntos de vista: el de los niños pero entrelazado con la historia paralela de una guerra de verdad, que se llevaba en la clandestinidad  de la resistencia francesa contra la ocupación alemana y los colaboracionistas locales. ( No tan explícita en la primera versión de 1962).

   Este relato me trae reminiscencias de una época espacio-temporal , ubicada en mi infancia y adolescencia, con pasajes que podemos reconocer como familiares, con momentos de alegría y otros de angustia, enojo y cierto revanchismo, vivido en mi época de estudiante secundaria y en las aulas escolares-de primaria y secundaria-  con el clásico” te espero a la salida en la esquina.”

   Esta Guerra de Botones, aunque inocente, muchas veces presagia situaciones más serias y descarnadas. Lo trágico tiene que ver con las consecuencias inesperadas y terribles que traicionan cualquier inocencia…Ayer y hoy…

   Dejando a un lado estos aspectos trágicos nos trasladamos con planos generales, a las bellas imágenes de la campiña francesa, con paisajes verdes e idílicos y también y los pintorescos personajes que habitan esos pueblos que viven la cotidianidad del humor y la picardía, a pesar de las limitaciones a las que están sometidos.

  Película muy cuidada, en la fotografía con excelentes primeros planos, en distintas escenas por ej. el niño que hace de protagonista, que despiertan y generan sentimientos de ternura porque son personajes infantiles(como el más pequeño con sus intromisiones reiteradas ocurrencias) y también los juveniles que son cautivantes.

   Nos regala, la película, dos historias amorosas, ambas matizadas por desenlaces inesperados, que aportan emoción, y son protagonizados por una joven, dulce, atractiva e intrigante, en cuanto a su identidad y pasado,  -Violette- una niña judía refugiada y protegida por una valiente, intrépida y osada vendedora del pueblo- Simone- con el que logra tanto el director, como el guionista,  un mayor equilibrio en secuencia narrativa enriqueciendo la película.

   A mi criterio me gustó, me pareció una bella historia, bien contada que se deja disfrutar con humor y placer, recuperando la inocencia y picardía de ese niño que todos tenemos, y siempre y cuando seamos sensibles y espontáneos. Cómo dejando a un lado la mirada de adulto adusto, racional y permitiéndonos recordar y re- vivir nuestras travesuras infantiles.

 

                                                          María Cristina Roth

 

Análisis de la película "La casa de los locos"

                     LA CASA DE LOS LOCOS

 

La película no me gustó, sí reconozco que tiene una buena fotografía,  buena música que anticipa, ya emociones y sentimientos…excelente la actuación de la protagonistas como de los actores secundarios. Se desarrolla, dada su temática, en un ámbito lúgubre, oscuro, alienante.

Me pareció un cuento de terror de la Segunda Guerra Mundial. Me pregunto  qué se puede hacer ante un panorama tan desolador?

Se puede avizorar una luz de esperanza? Creo que no. Porque es muy sórdida, truculenta, lacerante e in-humna. Es un mundo de tinieblas empañado por el horror, despiadado, cruel y hasta diría inclemente.

Observamos un dolor terrible, los días se inician como roedores: nos muestran, las escenas, un hombre a la intemperie, nada los podría cubrir, eran mentes y cuerpos desgajados ante el sufrimiento y la indiferencia del resto de las personas…El viento era una ventisca interminable. Eran gritos de aflicción que revelaban el carácter dramático y conmovedor del existir. Lo trágico enfrenta la abstracción y lo abstracto.

Esas personas, cada una desde sus perspectivas crean seres encarnados. El teatro despierta lo infinito que duerme en cada una de ellas. Desconociendo la temporalidad y la espacialidad en que estaban ancladas.

Fue esa la mejor forma de sacarlos del reino de la vida: de la temporalidad y de la espacialidad.

Esto me recordó un pensamiento de Merlau Ponty que dice: “ el espacio es tan relevante, es lo que caracteriza a un hombre sano contra el delirio y la alienación”.

 

Análisis de la película "El baile"

                             EL BAILE: CINE PARA SENTIR

 

Me quiero remitir a la cita, inicialmente, de Ana María Soriano, donde nos dice que el director italiano, Ettore Scola con su película “El Salón de Baile” del año 1983, es considerada la película, por la mayoría de los críticos, como una de las películas musicales por excelencia.

No hay diálogos y el peso de la película recae en la banda sonora, con su extraordinaria y expresiva en los diferentes espacios y protagonistas, en espacios comunes y cotidianos y los fotogramas que la acompañan, nos van llevando de la mano en un recorrido histórico, secuencial, donde evidencia una crítica y caracterización de la situación política de la Italia con desempleo, la pobreza expresada en secuencias y tiempos sonoros largos. Por ejemplo

1936: escenografía predominan las imágenes en rojo frente al triunfo popular

1939: Observamos ya la vestimento que nos muestra que ya ha sido invadida por los nazis

 1945: Se termina la guerra, gran tristeza los embarga por los que han muerto en ella, suenan las campanas, pero su sonoridad no es de alegría sino tiene momentos de dolor. Se reúnen  aquellos que estaban separados por la guerra y bailan juntos!!

1946: Crece la influencia de los aliados, los norteamericanos, suena el jazz tanto la banda como las letras son en inglés.

1950: Música latina, las mujeres se visten y se peinan diferente y la banda toca música mexicana.

1960: Aparecen allí también la música de los Beatles, y también se modifica la vestimenta, más rockera, camperas negras

1983: En este año se inicia la película se hace más difícil socializar, ya vemos  presente el individualismo  bailan separados y también con el mismo género ( hombres con hombres) y al final cada uno se va solo, por su cuenta, dejando el salón de baile!!

  Qué se siente? Que la película no es ajena al contexto social, político y económico de la época y hay una perfecta adecuación y armonía con la música y los protagonistas.

  Hay cortes musicales y fotogramas, que relacionan las diferentes escenas y épocas históricas diferentes, de acuerdo al color y sus cambios son  armonizados, melodiosos y rítmicos.

Por qué elegí este tema? Porque en el baile todo se expresa a través de la banda sonora y el cuerpo. Desde los mitos sagrados del Génesis domina la temática del cuerpo femenino como potencia misteriosa y maléfica, elemento oscuro y diabólico que se vale de “encantos y ardiles”  con actos de magia, seducción, fascinación, atracción y engaño. Y por qué no cautivar y engañar.

El poder de la mujer sigue confinado al plano de lo imaginario, fantástico y soñador.

 La libertad de dirigirse a sí mismo se aplica, en forma indistinta a los dos géneros, pero siguen construyéndose “en situación” de a dos, con sensualidad, encantamiento. Vemos a los largo de la diferentes escenas el cuerpo es vivido, desde la interioridad, como un yo mismo…y aparece a instancia lúdica del juego de las miradas cómplices, por momentos esquivas, de exquisita sensualidad, provocativas o sosegadas y apacibles!!!

  Aquí el cuerpo humano participa de toda la manifestación de la persona, un cuerpo iluminado por la música. No hay dualidad, conforman los bailarines una unicidad amalgamada, viva, vibrante, chispeante y… por momentos triste con cierta pesadumbre y abatimiento…

  El baile, es una de las manifestaciones, en  el que el cuerpo humano, patentiza la posibilidad concreta de ser y manifestarse, sin mediar palabra alguna. El diálogo aparece en las miradas, los movimientos sensuales, con voluptuosidad y también lujuria de sus cuerpos que expresan cada una de sus existencias y vivencias en “ese acontecer”.

 Scola nos muestra en este film con  magia, sonoridad y profundidad pristina  que la experiencia “con el otro” revela una dimensión de la persona absolutamente irreductible a la relación con el mundo. Por medio de la banda sonora se puede sustraer de toda objetivación y conceptualización- y nos lanza al mundo del misterio, a la dialéctica insondable de la mística de lo divino y lo humano.

       

                                                           María Cristina Roth

                                                           25 de noviembre 2019

 

 

 

 

Análisis de la película "Dublineses"

                                    DUBLINESES

                                                               María Cristina Roth

   La película se desarrolla teniendo como centro el decimoquinto relato “Los Muertos” de una colección de cuentos de James Yoyce y Huston eligió este para llevarlo a la pantalla. Es una sorprendente adaptación- el film-  fiel y precisa del relato cinematográfico, que asombra,  sobre todo por la extraña identificación  entre dos sensibilidades tan dispares, como la Huston y Joyce.

   Su hijo Tony, autor del guión y su hija Anjelica en el papel de Gretta, la protagonista que ofrece una excepcional interpretación llena de sutileza y verdad.

   La historia se presenta como un festejo con baile llevado a cabo de dos hermanas solteronas, y una sobrina en Dublin. Sin embargo, el tema de fondo es “la muerte”. Muerte de seres amados entrañablemente y queridos, que lleva a los personajes a realizar una mirada retrospectiva de sus vidas. Sobre todo a través de Gretta y de su marido, Gabriel,que sufre, al final de la película una dolorosa y desgarrante revelación.

   En la película no hay, muertos, si oscuros, sombríos y misteriosos personajes que comparten el ambiente decadente de la celebración de la Navidad. Las conversaciones, los bailes y canciones y una que el tenor no quiere interpretar “The last of Aughrim” ,pero que finalmente la canta para unos pocos… y se escucha la música  de la misma cuando ya terminada la fiesta parten de la casa y al escucharla le causa una gran conmoción a Gretta, nos van acercando a la temática que voy abordar y las escenas (1hora:10´ -23 minutos) que ella se queda parada arriba en la escalera, que se va creando el climax , para el desenlace final, que nos acerca a lo efímero de la vida, los amores perdidos y no correspondidos, la aceptación de la finitud de la existencia humana…

   Cuando Gretta habla con su marido en el cuarto con actitud “generosa”  y sus ojos invadidos por las lágrimas ante la revelación que le está haciendo y confesión sincera y profunda que la llevo en un viaje a su pasado juvenil y la pérdida de ese amor  que nunca pudo olvidar. Y es en su corazón una ausencia-presente…

  Amar a alguien, es amarlo entero, “cuerpo y alma”, razón que tal vez, por ello no hayan habían consumado su matrimonio, pero la persona solo es amante si sale al encuentro “del otro”. El amor no es ser amado sino “amar”, dar y no recibir, es siempre una manera de “ir”, de exportarse lo que no es uno mismo, dirigir la mirada hacia algo inasible. Al amor lo envuelve una lógica oblativa, rompe todas las categorías por encontrarse más allá de ellas. Somos por excelencia el ser de la palabra y del amor. En ese encuentro interpersonal entre, Gretta y Gabriel, estaba ausente la estructura “dialogal” y responsorial que requiere el amor. La unicidad de la persona es vivida como interioridad… En cada encuentro y comunión le otorga a la persona un carácter trascedente, es la única realidad sagrada que nos encontramos, y ese sentimiento profundo lo vivió Gretta con ese joven de 17 años, que muere tempranamente creando en ella un profundo sentimiento imborrable, de dolor y desasosiego del que no se puede liberar en el tiempo.

La dimensión temporal de la existencia

   La historicidad, y su percepción es una característica que solo se encuentra en el hombre. Indica el modo partícular de la existencia humana.

   Implica el hecho de que todo hombre se ve situado en una tensión, entre el pasado ya realizado, y nuevas posibilidades futuras, que lo harán realizarse individualmente o comunitariamente.

  Asume que la realización de la historia es una tarea personal a través de una decisión libre.

   La historicidad de la persona humana se realiza y actúa en un diálogo fecundo y libre con el pasado ya constituido y heredado, hacia un futuro que está abierto a la novedad y a la libertad. El pasado aparece y es vivido, porque permanece en cierto modo presente, en este caso en Gretta. No es un presente absoluto sino un presente temporal - ella lo hace presente a través de la memoria y el recuerdo-un presente en que ese pasado se resbala, se sustrae. Es un presente que existe en la tensión dinámica entre el pasado y el futuro. Esa muerte se disfumina en la nada de las noches y las sombras.

  Toda esa experiencia, Gretta, la vive como sufrimiento o dolor, es el modo como siente esa pérdida y la vive como frustración  y ve el camino de su existencia sembrado de impedimentos, bloqueado a la posibilidad de la entrega a un nuevo amor: Gabriel. Su existencia actual, dista mucho de ser un idilio. El desorden y el fracaso, la soledad y la angustia caracterizan de diversa manera en el presente ese pasado añorado.

  La muerte como problema existencial

   A diferencia del animal el hombre se da cuenta de su finitud, que camina hacia el hundimiento inevitable. La certeza de la muerte está siempre, en cierto modo presente en el horizonte de la conciencia. El filósofo Max Scheler nos habla incluso de una certeza innata y espontánea. Pero no se trata de un saber neutro e impersonal. La conciencia  de la muerte necesaria es una mezcla de amenaza inminente que no perdona, pero se nos presenta como algo distante y que por eso no oprime radicalmente. La negamos y hay una tendencia a la huida, en la mayoría de los casos las personas se dejan llevar por disipación exterior ( por ej. La escena el baile y celebración navideña) donde cada uno evidenciaba lo oscuro de su personalidad, dibujando” una falsa alegría”.

  Gretta, a lo largo de esa noche evidenció una nostalgia, un sentimiento de cordialidad forzada, porque la música la retrotraía a ese pasado de pesar y tormento: la muerte su amor de juventud truncado. La muerte de la persona amada la hiere a sí misma. Allí la muerte irrumpe  concretamente como amenaza del amor e hipoteca el sentido mismo de la existencia.  

  Cabría preguntarnos ¿Qué significa para la existencia que la muerte tenga poder sobre ella? El que sea imposible sustraerse a ella, e introduzca un estado irreversible. Frente a la muerte, todas las posibilidades, todos los proyectos concretos, que Gretta tenía en su juventud quedaron revestidos por un velo de nulidad.

   El hombre mismo es nada –escena de Gabriel mirando con una mirada perdida, plena de desesperanza y vacilante ese mundo que veía a través de la ventana que ya había dejado de ser su verdadero hogar. Estaba ante un paisaje espectral de una grandeza trágica y solitaria. Y ese paisaje se transformaba en el espejo de la desesperanza, y a la vez, rompe y desgarra violentamente sus proyectos.

“Su alma caía lenta al oír caer la nieve leve sobre el universo y caer leve la nieve, como el descenso de su último ocaso, sobre todos los vivos y sobre los muertos”

 

                                                         30 de junio 2021

Análisis de la película "Cuerpo y alma"

                                    Cuerpo y Alma

Estamos ante una película para mirar, sentir, acallar nuestro pensamiento y abrir el corazón, emocionarse ante maravilloso y a la vez enigmático vínculo entre sus protagonistas Endre y María.

Película que inicialmente me resultó muy hermética, confieso, que me costó transitar  las escenas del frigorífico, con muchas elipsis, porque venís de retozar con los ciervos en ese maravilloso y salvaje bosque y, de golpe veo una res colgada. Mi impresión fue de  cierta sorpresa y debo reconocer desagrado e impresión…

Su directora Indilko Enyedi, después de no filmar por muchos años encara este proyecto, a los 63 años; la historia de dos personas con el corazón roto y dolorido, resignados a una vida sin amor, pero, con reservas ocultas que sólo el impulso inconsciente con una cuota de azar, propicia el encuentro de dos seres heridos, solitarios y “diferentes” herráticos. Diría inescrutables y muy difícil acceder a su interioridad y en permanente dialéctica entre la soledad y un querer compartir, para ellos de muy dificultoso acceso.

Les cuesta interactuar y María con su cara inexpresiva , con una memoria extraordinaria, propia de su padecimiento, como su capacidad intuitiva , convive con una desmedida exigencia de perfección  que se manifiesta en escenas tales como la clasificación de las reses por los milímetros e grasa otorgándoles, ante la sorpresa de todos, la categoría B.

Es obsesiva, distante y fría, encerrada en sí misma y por momentos, nos sorprende con conductas sin filtro alguno, a su retracción para relacionarse, y pienso, la escena, cuando compra el celular, le habla e a continuación, hasta a mí me sorprendió , le dice con total naturalidad “ querés que hoy durmamos juntos” él queda impávido y acepta. Ya vimos que fue una experiencia fallida.

Esa timidez que ella manifiesta hizo, que yo creara con ella,  una conexión especial con ella desde el principio, es un personaje lleno de matices, como su increíble memoria y miedo al contacto humano.

Las interpretaciones son muy ajustadas a la historia, sin estridencias y los acontecimientos se van instalando a un rítmo pausado en la narrativa de las diferentes escenas…

 La interpretación que hace el personaje masculino Endre ,es un actor amateur que no había hecho cine en su vida..

La película empieza con una escena de dos ciervos (macho y hembra) retozando, libremente, en un paisaje bellísimo, nevado, con un primer plano impecable. Anticipo la inesperada alternancia, posterior, entre el estado de vigilia y el onírico o simbólico, que atravesara otras escenas de la película para poner de manifiesto lo más curioso que surge entre los protagonistas una similitud y simbiosis en sus sueños. Que difiere de su relación temporal, espacial de la corporeidad en la mundanidad.

Los sueños, ese mundo onírico que está caracterizado fundamentalmente porque se rompe la barrera de los consciente, de la lógica racional, de la lógica racional, es un mundo sin tiempo lineal, sin cronología, sin límites impuestos, sin espectadores y sólo adquieren connotación real en el estado de vigilia, en el intento ,ya desde la racionalidad consciente , donde se organizar esa imágenes asincrónicas en el relato sincrónico en el que ocurrieron.

Ese brillante y, porque no, para mí, desacostumbrado comienzo será continuado a través de secuencias concisas u sobrias que hará transitar la película amable. La directora es también la guionista de la película, la sobriedad y la frialdad expuesta, en su protagonista,  harán resaltar la ternura y hermosura manifiesta en la “especial relación amorosa y corporal al final del film. Donde hay una íntima entrega oblativa del uno al otro consumando en lo físico ese tránsito al amor relacional entre “cuerpo y alma”.

Acompañando la trama principal en la que se entrecruzan en forma genial la rutinaria vida diaria de sus protagonistas con sus sueños conectados y luminosos, se nos presentan también caras oscuras que esconden al hipócrita, al corrupto (el policía) . Nadie es lo que aparenta, cada uno esconde una realidad detrás de un estereotipo.

Concluyendo, sin por ello agotar el tema,  es un drama romántico, que manifiesta lo que no es nada sencillo, el dolor de una persona con asperger, aunque este no sea exhibido explícitamente en las conductas y actitudes de María.

                                                     María Cristina

Análisis de la película "Carta a Lila"

 

-                                                   Carta a Lila

Hola Lila!!!!

   Soy Maria Cristina te quiero pedir permiso, haciendo un salto cuantitativo y cualitativo etario, para iniciar con vos la “aventura” de zambullirme, en el hontanar de mi corazón, “asomarme sin miedos a mi vida “ de tu mano, con tú mirada tierna, pícara y profunda. Para que de esta forma encontrar esa magia que el día a día se empeña en robarme.

   He visualizado y vivenciado mi Lila interior, Alma, esa magia que me permitió volver a ser niña, a saltar, a imaginar y ser libre de todo condicionamiento o estructura social y cultural.

  Sabes por qué? Porque la vida está llena de secretos, hoy han nacido unos, y otros se despidieron de la vida,  unos cerraron sus ojos, y otros se han abierto a la Luz, al color, al trinar de los pájaros por las mañanas. Hoy he reído y he gozado; se despertó en mí, el soplo vital tejido de paradojas que me trascienden y desde mi interioridad, ese espacio y tiempo inviolable y lúdico desde el cual  abordo, con otra mirada , mis multifacéticas actividades.

   Feliz, libre con inmenso placer “pintando” a mi paso el peregrinar por mi Trelew natal. Querés acompañarme en ese recorrido?

   Ese impulso vital e interior que “ahora” me atraviesa y que me permite asombrarme con ingenuidad y esperanza a mi “mundo” interior y exterior.

   Establecí con vos un vínculo muy fuerte y profundo que generó en mí un proceso de re- conversión a  esa ingenuidad infantil, misteriosa, infranqueable e inextinguible.

  Quiero entregarme a la vida contando con tu amistad de manera que pueda afrontar todo lo que me suceda como una oportunidad, un sueño, un desafío colorido.

   Sé que en tu ciudad natal me esperas, escucho tu invitación a una nueva vida, quiero decirte que sí, para que en todo lo que me suceda triunfe la paz, la generosidad, la alegría la bondad y la esperanza y , desde allí, pueda conquistar el futuro

 antes que aceptar su condena.

  Agradeciéndote haberte conocido te pido que continuemos este diálogo epistolar para que todo en mí sea luminoso.

 

                                                      Un abrazo fraterno lleno de luz y color

                                                             Maria Cristina

                                                      15 de noviembre 2019

Análisis de la película "A pleno sol"

 

                                  A PLENO SOL

El título que le pondría “La sedución del dinero y lo perverso”

 

Lo perverso se denuncia o afirma desde una observación ética y moral –no es lo mismo ética que moralidad- , y, desde allí también, pude calificarse como irracional, anormal, o ilegítimo en términos sociales. Muestra una desviación del orden del mundo y lo sustituye por una regla arbitraria.

La inmoralidad de la perversión trasmuta la sexualidad en una abstracción ritual y ceremonial. La relación, estoy pensando entre Marge y Phillipp.

Perverso es lo que transgrede la ley, trata de fijar sus propias reglas, formalizarlas en un texto (el pasaporte o en el testamento) plasmarlas en un pacto. La perversión se afana por ser, lo vemos en la escena en que Delon toma otra identidad, e lo que quiere y quiere lo que es.

Hablar de perversidad es denunciar una desviación:

a)   En el lenguaje: en cuanto al abuso de palabras, signos y símbolos, o cual vemos en múltiples escenas de la película: retirar el dinero en el Banco, uso de pasaporte falso. Justificación de por qué estaba en esa habitación del hotel vestido de Phiillip con zapatos y una camisa de él con monograma!!!

b)   Lo racional: en cuánto al camino y al método, ej. cuando lo mata y lo tira al mar con el ancla…

c)    Al orden: fractura y una ruptura, se observa en varias escenas (y giros abruptos  en la narrativa)

d)   Lo natural: está en contra de lo que ocurriría en forma espontánea…, Alain Delon hace cosas inesperadas y sorprende en su audacia. Cuando se escapa tirando las valijas y luego las recoge con un taxi a vuelta de la manzana

Aquí aparece el papel de relación conceptual “dentro-fuera” en el análisis de la perversidad, por su carácter agresivo respecto a los valores sociales; que incluye, y hay escenas fuertes en la película, de relaciones destructivas, que son establecidas en el nivel simbólico y en lo cultural.

Tom Riple( Alain Delon) un caza fortunas, es enviado a Europa por el Sr, Greenleaf  para repatriar a su hijo Phillip, un plan boy y abandonar a su novia Marge. Delon ve que no tiene la menor intención de hacerlo. Y allí un giro narrativo donde Delon planea un crimen perfecto con tal de saciar sus ambiciones, oscuras y perversas que lo incentivan a realizarlo.

Es una película que se sumerge en las profundidades más miserables y deleznables de la condición humana. Porque sus acciones, son en muchos momentos un despropósito desde el punto de vista de la moralidad, porque para “hacer” algo también se “deshacen” los valores humanos. Se mueven en el ámbito de la hipocresía y del doble discurso. Donde los personajes no hacen los lo que dicen o piensan. No por ignorancia o falta de información, sino por cuestiones de  dinero, poder e ideología.

Diría que de un policial, un thrailer con un cierto toque romántico característicos de los años 60 en que fue rodada y de las que filmado Alain Delon.

                                            María Cristina Roth

 

 

 

 

Análisis de la película "El salón de baile"

La música 4.1. El caso de “El Salón de Baile” Eugenia Paredes Fernández “La música italiana: inmediatamente identificable, cinematográficamente eficacísima, conmovedora siempre” Carlos Colón. Resumen: Este estudio comienza con una breve reflexión sobre los inicios de la música en el cine y su importancia dentro del desarrollo y la comprensión de la obra. La película El Salón de Baile de Ettore Scola, considerada por muchos críticos como una de las películas musicales por excelencia ya que prescinde de los diálogos para dar todo el poder a la banda sonora y a los bailes, nos sirve para demostrar la importancia de la música en detrimento de los elementos considerados “típicamente” narrativos dentro de un film. Palabras clave: Cine, música, baile Introducción Intentar delimitar con una fecha o acontecimiento los inicios de la música en el cine es prácticamente imposible y más teniendo en cuenta que son muchos los autores que consideran que el cine mudo nunca existió, para ellos cine y música siempre han ido de la mano. Rigiéndonos por esta teoría podemos considerar entonces que la música ha estado presente desde el principio mismo de la cinematografía, cuando en 1895 nació oficialmente el cinematógrafo de los hermanos Lumière. Ya en estas fechas hay constancia del acompañamiento de un piano en directo durante las primeras sesiones proyectadas en Le Grand Café, de esta forma se hacían más amenas las proyecciones y se creaban analogías expresivas de los fotogramas que aparecían en la pantalla con la intención de subrayar los momentos más importantes del filme y facilitar así la comprensión de las imágenes. Otro de los motivos por los que se introdujo la música en los locales de proyección era para combatir y disimular la contaminación y presencia de ruidos incontrolados procedentes tanto de los primeros equipos de proyección al ser utilizados 1 como del exterior de la sala, “de esta manera se crea una espacio sonoro organizado que evitaba tanto los silencios como los ruidos” (Pachón Ramírez, 1992: 22). La incorporación de la música a la pantalla se produce así de forma gradual como testigo sonoro de un cine que no ha encontrado aún su propia voz, a través de la interpretación musical en directo durante la proyección de la película. La música, tal y como dice Carlos Colón, “contribuía a la creación de la verosimilitud fílmica a través de su impacto emocional en el espectador y a través de su acción de continuidad frente a la brusca discontinuidad de las fragmentarias imágenes proyectadas” (1997:31). La música ayuda a dar realidad a lo ficcional y hacer más creíble las historias narradas. Pero no es hasta los años veinte cuando las partituras originales y creadas exclusivamente para las proyecciones empiezan a ser más frecuentes. En el caso que nos ocupa, el cine italiano se ha caracterizado desde sus orígenes por tener tendencias realistas y gran valor artístico. Cuenta con un número importante de grandes realizadores, músicos y actores natos que han sabido transmitir de manera magistral el modo de vida del país y sus costumbres más enraizadas, es, en gran medida, un cine intimista, defensor de las injusticias, políticamente incorrecto y con tintes de comedia. Europa se caracterizó, en las primeras décadas del siglo XX, por el trabajo dentro del mundo cinematográfico de prestigiosos compositores que colaboraban con los realizadores del momento experimentando interesantes uniones entre el cine y la música. En Italia fueron muy reconocidos dos compositores de ópera, Ildebrando Pizzetti y Piero Mascagni a los que se les identifica como los precursores de esta tendencia. En principio era un cine que reacciona ante los horrores de la guerra buscando la realidad y denunciando las injusticias a través de sus testimonios, un cine de solidaridad y compasión. 1 “Surgió [la música de las películas] no tanto como respuesta a una pulsión artística como por la necesidad de que hubiera algo capaz de enmascarar el ruido generado por el proyector, porque en aquellos tiempos no existían aún paredes insonorizadas entre la máquina y el auditorio. Aquel desagradable ruido alteraba el disfrute visual en considerable medida. Instintivamente, los propietarios de las salas de cine recurrieron a la música, y fue una elección acertada el utilizar un sonido agradable para neutralizar otro menos gratificante.” (London, 1930: 23) El primer compositor italiano de música cinematográfica que podemos considerar como un auténtico profesional del género fue Cesare Andrea Bixio, que hasta los años sesenta compuso algunas de las melodías más populares del cine del país y fue el encargado de musicalizar la primera película sonora italiana. Es una época en la que grandes músicos componen obras para películas de escaso prestigio. A pesar de que los inicios fueron duros para estos profesionales, con el tiempo se les ha reconocido su prestigio no sólo en su país sino en todo el mundo, y han sido muchas las colaboraciones creativas entre compositores y cineastas dando lugar a composiciones musicales innovadoras y muy importantes para el éxito posterior de la cinta. Entre los casos más conocidos están Rota y Fellini, Fusco y Antonioni o Morricone y Leone. Argumento El salón de baile es un recorrido por la historia de Francia a lo largo de cincuenta años utilizando como forma de expresión la música y los bailes, a falta de diálogos Scola consigue adentrarnos en los distintos cambios sociales y políticos ocurridos a lo largo este tiempo, desde 1936 hasta el momento de rodaje de la cinta, 1982. Para ello, analiza una sucesión de modas y comportamientos sociales creando como única perspectiva lo que ocurre en el interior de un viejo salón de baile. La historia comienza en una noche de 1982, el salón comienza a llenarse de público que busca pareja para bailar al ritmo de la música disco interpretada por una banda de músicos sobre un escenario. La primera imagen muestra al anciano barman que pone en funcionamiento un aparato de música y desencadena la obra con un flash back que nos transporta a cinco décadas antes, lentamente comienzan a entrar en escena mujeres que representan caracteres y formas de comportamiento muy diferentes entre sí, así vemos a la histérica, la tímida, la de aspecto raro, la mujer fatal, la anciana, la romántica y todas están muy atentas a su aspecto externo observándose en el espejo del gran salón. Minutos después, cuando las mujeres ya han ocupado sus puestos dentro del lugar, aparecen los hombres que realizan el mismo ritual ante el espejo, también su comportamiento y aspecto es muy diverso, como queriendo representar todas las clases sociales del momento. La pantalla pierde su color y los personajes se empiezan a relacionar entre sí. En total se muestran siete momentos en la historia francesa a lo largo de toda la obra y en cada uno de ellos vemos a los mismos personajes representados con el atuendo del momento y bailando la música típica de cada época histórica. Estas primeras escenas son muy importantes para que el espectador entienda el desarrollo del filme ya que se nos presentan los actores que nos acompañarán a lo largo de toda la obra y que irán cambiando su aspecto e indumentaria conforme lo haga el momento histórico que representan. La obra finaliza cuando el salón se va quedando vacío representando así la soledad del ser humano, poco a poco las luces se apagan y acaba la historia narrada a través de la música y los números de baile. El creador de la banda sonora de El salón de baile fue Vladimir Cosma, compositor y violinista nacido en Bucarest y proveniente de una importante familia dedicada a la música. Su formación musical la desarrolló en su ciudad natal, pero muy pronto se traslado a Francia donde amplió sus estudios y a partir de los años setenta comenzó a colaborar en importantes películas para las que realizó obras musicales muy reconocidas y prestigiosas. Además de su trabajo en El salón de baile que es la obra que nos ocupa, también realizó la banda sonora de La cena de los idiotas, Salir del armario, El jaguar o Diva, con la que ganó en 1981 un premio Cesar. Posteriormente conseguiría otro con El salón de baile. La película está basada en una popular producción musical llevada a escena por Le Troupe du Théâtre du Campagnol y creada a partir de una pieza de la bailarina Pina Bausch Kontakthof que adaptó al cine el realizador italiano. Tal y como él mismo ha comentado en alguna entrevista, “si bien es una película sin palabras, tuvo un largo guión que hice con Scarpelli y con Maccari donde cada personaje debía tener su psicología muy precisa, la misma a través de 70 años de historia, de vida. Entonces escribíamos todo el diálogo, todas las frases que cada personaje debía pensar mientras rodábamos aunque no las decía porque el filme era mudo. Esos personajes sinópticos son lo que cada uno piensa diferente del otro”. Análisis Existen películas donde la música utilizada adquiere una gran relevancia en el desarrollo de la narración, sin embargo hay otras cuya musicalidad se convierte en el elemento esencial dentro la narrativa del film y nada se entiende fuera de ella. Este es el caso de El salón de baile donde la originalidad formal de la obra le ha dado ya un lugar privilegiado dentro de las obras maestras del cine. Con los números musicales Scola aporta sentido a cada una de las escenas y carga de significado el discurso transmitido ya que a lo largo de la cinta, de casi dos horas de duración, no se pronuncia ni una sola palabra. Podemos decir que la película aunque no es muda, porque la música es constante, está tratada como tal ya que no tiene diálogo. Pero no por ello podemos considerarla una película típicamente musical, pues la música no es un fin en sí misma, sino sólo el medio para contarnos el paso del tiempo y las distintas historias. A través de ella y de los cambios de vestuario nos damos cuenta de ese discurrir temporal que quiere mostrar el director. Lo que a priori puede parecer un inconveniente muy difícil de solventar, ya que en la comprensión de la historia suele ser fundamental el argumento, no lo es en este caso debido al magnífico trabajo de los intérpretes y a la inteligencia con que están utilizados los éxitos musicales y los bailes de cada época, que suenan en versiones muy variadas y originales. Esto nos demuestra que la narrativa cinematográfica necesita muy poco para funcionar, hacerse comprender y mantener en vilo al espectador; por lo que nada es indispensable en un film, tal y como se observa en la obra, ni siquiera los diálogos. El director lleva a cabo la búsqueda de una nueva manera de ver y contar las cosas, donde el diálogo no es el centro de la obra ni lo que nos permite conocer lo que ocurre, el método que Scola utiliza consiste en diseccionar las escenas a partir del comportamiento de los personajes y la música que lo acompaña. El cine se convierte con El salón de Baile en “un arte basado en la mentira y la ilusión, y la música es un magnífico ilusionista. Los actores y la cámara se ven limitados a una representación bidimensional, mientras que la música, ambigua por naturaleza y escurridiza por definición, puede complementar, equilibrar o incluso contradecir el impacto visual de las imágenes” (Pachón Ramírez, 1992: 12). Se consigue en un escenario único- vieja sala de baile- entrelazar distintas historias utilizando siempre los mismos intérpretes (compañía teatral ‘Le troupe du Théâtre du Campagnol’) a los que lo único que cambia es su indumentaria. El cineasta reitera así su tendencia intimista a retratar conflictos colectivos a través de la visión de personajes e historias individuales que se van entrelazando unos con otros. Al no haber diálogos todo queda en manos de los actores que utilizan un lenguaje corporal muy correcto para transmitir distintas emociones como la angustia, la alegría, el miedo o la vergüenza. La obra es profundamente teatral gracias a la formación del elenco de actores, sus interpretaciones son muy correctas ya que todos ellos (excepto dos) van cambiando sus personajes y roles sin despistar al espectador, a esto se suma una maravillosa banda sonora que adapta los éxitos de la época al tiempo que relatan. Scola consigue con muy pocos elementos la máxima expresión, para ello se sirve de pequeños cambios en el decorado, un vestuario que nos adentra en cada momento social y unas secuencias donde se van entrecruzando varias historias a la vez. En este caso se obvian todo tipo de explicaciones narrativas, que en verdad no son necesarias para la comprensión del relato, pero provocan que el espectador tenga que agudizar sus sentidos e interpretar la película y esto puede generar distintas interpretaciones. Nos encontramos, por tanto, ante un espectador alerta que debe ir uniendo los fragmentos de este puzzle para que finalmente comprenda la historia total, o más bien, la relación que hay entre las múltiples historias que se entrecruzan. El salón de baile es una historia totalmente disgregada. Los actores no pasan por una situación inicial, un nudo y un desenlace sino que la acción se rompe en varias líneas diferentes, aunque conectadas gracias a las relaciones que se establecen entre los personajes y el espacio. El contenido de la obra está formado por un entramado de pequeñas historias y el sentido de cada escena se consigue con la unificación de ellas. Son historias atómicas, independientes argumentalmente unas de otras (en total siete episodios o bloques narrativos que comentaremos posteriormente) pero que se relacionan entre ellas por dos elementos comunes, por un lado todas se desarrollan en el mismo lugar (el salón de baile), y por otro, coinciden los personajes que las interpretan. Cada una se desarrolla íntegramente antes de dar paso a la siguiente y no existen elementos argumentales que las unifiquen. En esta obra el baile se utiliza como vehículo por los personajes para comunicarse, relacionarse entre sí de forma muy precisa y clara para que el espectador entienda lo que está sucediendo en cada una de las escenas que conforman la estructura de este film sin necesidad de explicarlo con palabras. La música crea así “el motor afectivo de la historia, siempre va detrás de la imagen, pero de forma paradójica actúa de cómplice del espectador anticipándole la tensión creada. La música en el film es la que más sabe de la historia en un momento determinado, y así se lo va diciendo al oído del espectador” (Porta, 1998: 106-113) Pero también la postura adoptada por los personajes en determinados momentos de la película transmite sensaciones y emociones que confirman lo importante que es la comunicación no verbal, en este caso la corporal, para la comunicación humana cuando no existe la verbal. Este guiño que nos hace el director provoca que el espectador participe indirectamente en el desarrollo de la obra y observe como testigo directo los diferentes acontecimientos que suceden en el salón de baile. Dentro de las escenas los números musicales refuerzan el clima emocional de las situaciones y participa directamente de las emociones de los personajes, las envuelve y las amplifica proyectando una intensidad máxima de cada gesto o comportamiento. Estamos ante un modelo de mundo de lo ficcional verosímil, se cuentan historias diferentes a la realidad, aunque semejantes a ella. Los personajes pasan de principales a secundarios mezclando así elementos narrativos, aparecen y desaparecen a su antojo a lo largo de toda la obra manteniendo al espectador muy atento para poder reconocerlos. La historia narrada aunque ocurre en Francia, podría ser la de cualquier país desarrollado del siglo XX ya que la simbología con la que se representa a los diversos personajes es universal. Y es aquí donde uno, como espectador, se siente representado y atraído por esta película de miradas, gestos y música. Los episodios o bloques narrativos2 se muestran en continuidad (duran sólo unos pocos minutos) y cronológicamente se pueden dividir en los siguientes: 1982. Momento presente: el salón comienza a llenarse de público y van presentándose los distintos personajes de la obra, cada uno de ellos tiene un rol muy característico que irá cambiando conforme lo requiera la historia. 1936. Triunfo del Frente Popular: Los personajes bailan al ritmo de música francesa de la década del 30. Son trabajadores que se alegran de la victoria electoral del Frente Popular francés, coalición política de socialistas, comunistas y radicales, en mayo de 1936. El salón está adornado con pancartas y banderas rojas que denotan el clima festivo, el titular del diario comunista L´Humanité (“Le 3 Mai 1936 Victoire du Front Populaire”) nos pone en antecedente del momento histórico en el que nos encontramos. 1940. Ocupación de Francia: En este caso la lectora lee la revista Cinevie, el ambiente es sombrío, hay llantos y desesperación por la caída de la ciudad en mano de los ejércitos de Hitler. 1944. Liberación de Francia: Las campanas se utilizan como elemento simbólico para anunciar la liberación de París. El barman enciende las luces del lugar en señal de victoria. 2 Un bloque narrativo sería un conjunto de secuencias relacionadas por el espacio físico o la acción, por los personajes o la temporalidad. 1945. Fin de la II Guerra Mundial: El salón cambia de escenografía. La luminosidad , el colorido y la banda de música Blue Boys Band reflejan un clima festivo. El jazz suena mientras los bailes son torpes ya que se estaba descubriendo un nuevo ritmo. Los aliados (norteamericanos, ingleses, franceses y soviéticos) han ganado la guerra y han liberado a Francia del poder nazi. Ahora nos encontrados con el fin de la ocupación alemana y el nacimiento de una nueva ocupación, en este caso cultural, la americana. Así observamos elementos simbólicos de esta cultura como son la coca cola y la música de jazz. El jazz es reemplazado por las composiciones de los musicales del cine de Hollywood y los personajes van a imitar en sus números musicales y en su vestimenta a los actores del momento (Fred Astaire y Ginger Rogers), también la escenografia utilizada por Scola va a ser la típica de ese periodo, una luz blanca sigue a la pareja para resaltar sus movimientos y diferenciarlos del resto de la escena. Así, todas las miradas están puestas en esa pareja. La invasión de los gustos musicales de la nueva potencia mundial se refleja cambiando al rock and roll. El realizador intenta dar un toque de atención a esa invasión cultural utilizando una canción que es el paradigma de la cultura francesa, una versión a trompeta de la clásica La vida en rosa que popularizó Edith Piaf. 1956. Estilo de vida americano: Una banda musical llamada Acapulco´s Boys demuestran el auge de los ritmos caribeños y brasileños de la época. Vemos actitudes racistas y xenófobas en algunos personajes, jóvenes que se rebelan ante el poder autoritario de sus padres. Es la dualidad entre mantener las apariencias o vivir la vida y ser rebeldes. Se versiona Tutti Frutti, una de las canciones de rock más conocidas del momento, popularizada por Elvis Presley. 1968. El Mayo Francés: A finales de los años 60, una ola de agitación conmueve al mundo. Jóvenes que se manifiestan contra el sistema establecido son protagonistas de diferentes revueltas en diferentes países. Su culminación tiene lugar en París durante el mes de mayo de 1968. Esta juventud denuncia que el sistema capitalista es totalitario ya que se ocultaba bajo el poder económico para cometer injusticias, y se opone a la sociedad y a la cultura burguesa que, a través de la publicidad y la propaganda, generan necesidades de consumo ficticias. En este momento ideológico, la película muestra el salón oscuro, y el sonido de sirenas de la policía. Jóvenes entran sigilosamente por la ventana de la sala y buscan en la radio una canción que los identifique, Michelle, de Los Beatles suena como un canto de esperanza, como un acto de rebelión frente al estilo de vida que imponen los gobernantes. Todos la cantan y la bailan como símbolo de liberación. 1982. Momento presente: la película vuelve al año donde comenzó. Otra vez la música disco suena en el lugar y ya algunos personajes comienzan a despedirse y abandonar la pantalla, lo hacen como fueron llegando, solos. Al final la soledad del salón es una metáfora del vacío interior que acompaña al ser humano, las luces se apagan y todo aparece en penumbras. Todos los episodios tienen un inicio y un fin, y están tratados de forma seriada. No existe un protagonista claro ni una trama más importante o con más peso en el desarrollo del relato que otra, esto provoca en el espectador la sensación de no conocer a ninguno de ellos en profundidad. Cada historia que se nos presenta actúa como un fragmento relacionado, en este caso por los personajes que se mueven por unos u otros “capítulos” del film. Con respecto al tiempo, existe un desorden temporal (tiempo no lineal) con estructura anacrónica (hay diferencia entre el orden de la historia y el orden del discurso) por el uso del flash back3 . La película de este modo avanza a saltos. Resaltando estas elipsis temporales se consigue lo que Wolfgang Iser denominó los "espacios vacíos" del texto, puntos de indeterminación que exigen la participación activa del receptor, el cual los rellena en su mente dando cohesión y continuidad a lo que en principio no es más que una serie de segmentos aislados. Es el espectador quien, relacionando los distintos fragmentos, infunde sentido al discurso y vuelve a crear la obra, esta vez en su mente. La película se va dividiendo en épocas históricas y nos va mostrando poco a poco (y entrelazado) qué le sucede a cada personaje en el momento en que se encuentra la trama. Comienza en el mismo escenario, en el mismo lugar en el que acaba, y la primera escena (puede considerarse un preámbulo de lo que se desarrollará a continuación) es el momento presente y después hay un retroceso de cincuenta años, para acabar en el momento actual de nuevo (año 82). Su estructura es cíclica ya que el momento temporal del inicio del discurso se asemeja con el del final, aunque no es idéntica escena (al inicio se van presentando los personajes y al final se despiden). Con respecto al tiempo interno de la historia (tiempo que afecta a los sucesos que ocurren dentro del argumento de una película) estamos 3 Analepsis: evocación de un suceso anterior al punto de la historia en la que se encuentra, mostrar hechos del pasado. hablando de cincuenta años en la historia del país y el tiempo del discurso (en que se tarda en contar la historia) son 112 minutos. La obra es novedosa en su estructura ya que no es una película musical a pesar de que están presentes casi todos los géneros musicales; es novedosa por la ausencia total de diálogos entre los personajes, éstos no hablan entre sí en ningún momento, no hay tampoco un narrador que nos vaya contando la historia. Los personajes van buscando en el baile la solución, aunque sólo por unas horas, a su soledad y a su nostalgia. El salón se convierte así en un espacio simbólico en el que los personajes no solo bailan sino que sueñan y viven experiencias inolvidables, es el discurrir de la vida y la sala se muestra como espectador impasible de una historia que sigue su curso. Es una puesta en escena sencilla que prescinde de las grandes producciones, así Scola da relevancia a los actores y al relato. En todo caso, El salón de baile es un viaje intemporal y memorable, lleno de ironía, pero como toda mirada que se hace hacia el pasado, también de ternura y de sentidos homenajes, con una banda sonora excepcional que acompaña la historia de una vida y da la posibilidad al espectador (debido a que reconoce las canciones) de recrear sus propias imágenes, reinterpretando las sensaciones, los rostros y las historias, y transfiriéndolo a su universo privado y a sus vivencias. Se disfruta con cada número de baile y con las muchas interpretaciones que puedes realizar de las historias que allí se narran, esto nos demuestra que no sólo son obras maestras las películas de actores reconocidos o guiones brillantes, las superproducciones con despliegue de medios y grandes decorados. Esta obra, más que ninguna otra, representa como se puede hacer buen cine, algo que además de entretener pueda conmover al espectador, y hacerlo con poco presupuesto, escasos decorados y desconocidos actores. Bibliografía CHION, Michel (1997): La música en el cine, Paidós, Barcelona. COLÓN, Carlos y otros (1997): Historia y Teoría de la música en el cine. Presencias afectivas, Alfar, Sevilla. LACK, Russel (1999): La música en el cine, Cátedra Signo e Imagen, Madrid.